¿Te has preguntado cómo es que un niño aprende a hablar de forma simple y natural? ¿Por qué no sucede lo mismo con la lectura?
Para el médico estadounidense Glenn Doman, el aprender a leer es tan fácil como aprender a hablar. En realidad, la clave está en la metodología que se utiliza.
El método Doman tiene su origen en las investigaciones sobre el tratamiento de niños con lesiones cerebrales. Éstas arrojaron que el cerebro humano no se desarrolla con el paso del tiempo, sino cuando hay una estimulación de calidad, especialmente a edades tempranas.
De esta manera, el niño puede desarrollar al máximo sus capacidades cuando se le presentan los estímulos adecuados de forma sistemática.
Para que te des una idea de la importancia de una estimulación de calidad, los niños con lesiones cerebrales desarrollaron habilidades cognitivas con resultados excepcionales.
¿Por qué no hacerlo así con todos los niños?
Si aplicamos este método a la lectura, el niño recibe una serie de estímulos denominados bits, que no son otra cosa que unidades de información que se agrupan en categorías y se presentan de forma simple y divertida.
Específicamente, al niño se le muestran series de cinco tarjetas con palabras que corresponden a una misma categoría, por ejemplo: colores, comida, animales, etcétera. Las categorías tienen la finalidad de que el niño vaya estableciendo relaciones con las palabras, lo cual favorece la formación de conexiones neuronales.
Gracias a que las sesiones son breves, novedosas y se repiten a lo largo del día, tal como lo establece el método, el éxito está asegurado: el niño aprenderá a leer de forma natural, ¡y se divertirá en el proceso!
¡Adiós al método silábico!
En Emlider Kids, todas las capacidades del niño serán aprovechadas para favorecer su desarrollo y aprendizaje, no sólo en la lectura, sino en todas las áreas.